Quiero sentir tu peso aplastándome.
Quiero morderte y destrozarte:
morderte los lóbulos, los hombros,
las costillas, el ombligo,
las ingles.
Quiero que me muerdas y me destroces:
que me muerdas los labios, la cara,
el cuello, las vértebras,
las caderas, los muslos.
Quiero sentir tus manos, tu calor, tu piel.
Quiero acariciarte con las uñas, y también clavártelas.
Quiero sentir tus músculos debajo de mí,
y que me levantes y me muevas como quieras.
Quiero olerte [tu piel, tu aliento] y tocar tu pelo.
Quiero mirarte mientras me siento encima tuyo.
Quiero reírnos, y hablar, y bromear.
Quiero marcarte, y que me marques,
con un hierro caliente y húmedo,
como si fuera un animal.
Quiero sonreír, reír y gritar.
Quiero sentir tus ojos, tu cuerpo, tu deseo.
Quiero hacerte sentir, desear, gritar.
Quiero clavar mis dientes en tu cuello, y alimentarme de vos.
Quiero que te alimentes de mi.
Quiero ser tuya.
Y hacerte mío.
13/2/06
dejé mi blog olvidado por mucho tiempo... supongo que me da fiaca trancribir...
ResponderBorrarlloré y lloré... extraño el IVA... extraño el LIEPA al que solo fui un tiempo...
me acordé de cosas mías, de las del A y B1 (porque siempre estuve en el grupo de los más chiquitos) y ahora hasta me acuerdo de la infinita mitología griega que me leyó Itatí...
agradezco que me hayas traido a la cabeza más y más recuerdos...
y te agradezco hacerme llorar, porque como bien dijo Agostina, llorar es lindo, verte llorar no...
mucha suerte!