El problema no es ella. Ella es intercambiable: podría ser ella o podría ser otra, y el problema seguiría sin ser ella.
El problema es que ese es mi lugar.
Ese era mi lugar, pero ese sigue siendo mi lugar.
El problema no es que duerme en la misma cama en la que dormía yo con él, el problema no es que desayuna con él como solía hacer yo.
El problema es que sale con mis amigos, se ríe con mis amigos, come con mis amigos, hace fiestas con mis amigos. Con mis amigos y con él.
Y yo nunca renuncié a esa vida. Me mudé y renuncié a él, pero nunca renuncié a mi vida y a mi rutina con mis amigos y conocidos y compañeros de clase y la parte de él que nunca dejó de ser mi amigo.
De repente me encuentro con que mi lugar en sus vidas ha sido usurpado. Nuestra vida en común se ha convertido en su vida en común.
Y me duele saber que nadie me echa de menos. Me duele saber que mi hueco lo ocupa otra persona sin que nadie piense más en mí.
Porque entonces es como si nunca hubiese existido.
No seas idiota. Tú misma te has mudado y ahora tienes otros amigos y te ríes con otra gente y eso no significa que tus otros amigos nunca hayan existido. Ni siquiera significa que ahora ya no existan :)
ResponderBorrarEl problema es verlo.
ResponderBorrarY la realidad es que prácticamente no tengo amigos nuevos.
Dos.
Estoy bastante sola acá.